Aurora Luque y Francesc Parcerisas, nuevos poetas de la colección ReVersos

La Universitat de Barcelona publica en un volumen y de forma capiculada (edición de dos libros unidos en sentido inverso) el poemario de Francesc Parcerisas (Begues, 1944), «Tothora fos encís», y el poemario de Aurora Luque (Almería, 1962), «Desolvidar».

Texto: Enrique Villagrasa

 

Noemí Montetes-Mairal i Laburta es la directora de la colección reVersos de la Universitat de Barcelona, que está vinculada de alguna forma y manera a su reconocida Aula Poètica, y que en esta ocasión publica también en un volumen y de forma capiculada (edición de dos libros unidos en sentido inverso) el poemario de Francesc Parcerisas (Begues, 1944), Tothora fos encís, y el poemario de Aurora Luque (Almería, 1962), Desolvidar. Que son ni poco ni mucho, un florilegio de poemas, en elección personal de cada poeta, tanto publicados como inéditos. Por supuesto, el pertinente e inteligente introito a dichas selecciones lo escribe la directora de la colección con el título Llindar. Francesc Parcerisas i Aurora Luque, a l’encontre de la llum (en catalán) y Umbral. Aurora Luque y Francesc Parcerisas, al encuentro de la luz (en español). El último parágrafo del texto es muy claro: “Este volumen es una doble y singular invitación lírica al milagro cotidiano de la existencia, al milagro de ir, como Ícaro (símbolo del poeta que no se rinde, que aspira a elevarse más y más) al encuentro de la luz”. Montetes-Mairal dixit.

Creo que es una muy buena idea esta edición, que recuerda a la colección Los Poetas de la Venida, dirigida por Cristóbal López de la Manzanara (quien coordinó en Huerga y Fierro Editores una antología muy heterodoxa con ese título), para la Isla de Delfos (Sain Just Ediciones), aunque en su caso presentan ediciones cuasi facsímiles, pero también en un volumen y de forma capiculada. En esta ocasión tengo el libro que contiene Amenaza en la fiesta de Tomás Sánchez Santiago y Limitación del vuelo de Ezequías Blanco. Son los primeros libros que publicaron ambos poetas en su juventud. En cuanto al volumen que nos ocupa estoy de acuerdo con Noemí Montetes en su reflexión sobre las poéticas de Parcerisas y Luque, partiendo de la imbricación de palabra e imagen, ese instante preciso y ese momento detenido, y ese contrapunto sobre el análisis y la intuición. Dado que los dos poetas son verdaderos maestros en el poetizar pluscuamperfecto de esas dicotomías o léase conceptos complementarios, sin ir más allá.

Nada nuevo se puede decir sobre Parcerisas ni sobre Luque, son poetas justos y necesarios en la lengua catalana y en la española, con poéticas peculiares, singulares, algo parecidas o al menos un tanto afines, con enjundia y pensamiento filosófico que nos hace parecer que es una misma voz, con matices distintos. “al fons dels teus ulls/ el violent desig de compartir la quimera” (Parcerisas) y “Por eso es que me siento/ bajo un almendro fieramente en flor” (Luque). Y sí, bien es cierto que ambos poetas van en busca de la luz, persiguen esa luz con distinta decisión, aunque en ambos hay memoria y mirada: “¿Serà aixì que, en el camí de la fosca,/ anirem a l’encontre de la llum?” (Parcerisas) y “Estamos condenados/ a ser menos flexibles que la luz” (Luque).

Podemos comentar que la poesía de Francesc Parcerisas es de ecos anglosajones y bebió del realismo poético de aquellos años sesenta, aunque hoy escribe una poesía más intimista, con resonancias clásicas y gran preocupación moral, existencial diríase. Y Aurora Luque es la más alta exponente de las voces y los ecos de la poesía clásica grecolatina, como traductora y como poeta. Es una poesía luminosa, que se abre al azul del griego Mediterráneo. Y en sus versos anida lo lúcido en lo lúdico. Poesía enormemente existencial también y preocupación moral. Creo que ambos poetas están dotados de ese saber hacer que distingue a la poesía, pues ese temor y temblor de sus versos te queda cuando los lees, que es fruto de ese azar y necesidad mediterránea en busca de la sabiduría del deseo de vivir y de gozar de la naturaleza desde su ser islas fulgurantes.

Así pues, los mejores anhelos de nuestras vidas quedan confirmados en sus poemas, reflejados en nuestros propios espejos y son poemas optimistas que transmiten esperanza, no lo duden. ¡Ahí es nada con el tiempo que corre! Y no olviden de leer sus introducciones explicativas a su poesía, tanto de Parcerisas en Pretextos, formalizacions, pertinences, de la pág. 21 a la 36, más la treintena de poemas recogidos bajo el título Una tria (incluidos los no publicados en libro), como de Luque en Que rocen entre sí la vida y las palabras, de la pág. 21 a la 41, que da paso a la treintena de poemas y los siete inéditos, recogidos bajo el título de Larvas de sirena.

 

Bocí de paper

 

M’has deixat un misatge

enganxat al parabrisa.

Mentre condueixo s’agita

com si volgés volar,

però després la pluja

l’arrapa, moll, al vidre.

M’escriu als ulls el teu amor.

 

Francesc Parcerisas

 

2

Nota del 3 de abril de 1981

 

La primavera es

insostenible. Pasa.

La culpa es de la vida:

se complace en crear

y no hay museo, ni siquiera urna

reservada por ella

para la luz suavísima del pétalo

en la tarde lluviosa.

 

Aurora Luque