«Les nostres mares» de Gemma Ruiz Palà

Texto: Redacción  

 

La escritora y periodista Gemma Ruiz Palà se convirtió en 2022 en la primera mujer en 19 años en ganar el Premi Sant Jordi de Novela con el libro Les nostres mares, que fue el más vendido en ficción en catalán el Día de Sant Jordi en Catalunya. En breve, también, podrá leerse en castellano. La  editorial Consonni lo ha comunicado así en sus redes: «Nosotras tenemos la inmensa suerte de publicar la traducción al castellano, que si todo va bien, verá la luz en enero de 2024». Finalmente, nos confirma su editora María Mur que se publicará en febrero.

Esta novela, un homenaje a los sueños de las madres del posfranquismo, es la segunda que publica Gemma Ruiz Palà.

 

Así comienza*:

«Lali, historia viva de su tiempo. Testigo privilegiado del progreso. Del nuevo confort, del nuevo bienestar: del nuevo consumo. De la vida moderna, tú, que ya era hora de que ellas también catasen el sabor de la contemporaneidad, que el cerdo de Franco ya la ha diñado, que ya no hay crisis del petróleo, que se ha acabado la guerra del Vietnam y la ONU acaba de declarar el Año Internacional de la Mujer. Y, por si fuera poco, otra efeméride: el primer hijo de Lali llega al mundo el mismo año que los primeros pañales de un solo uso. ¡Benditos dodotis! ¡Ni gota ni gota!

Para ellas, la modernidad será un invento para no tener que tocar tanta eme. Y eso, para una madre, sí que es nacer con una flor en el culo: Lali pertenecía a la primera generación que no tendría que lavar a mano -en el lavadero o en el fregadero, con jabón de pastilla, bien neutro, de coco, a ser posible, los paños y paños y más paños de tela manchados de pipí y de cacota que los bebés pringaban día sí y día también. Ya dicen que por más gloria que coman los niños…

Y por si haber tenido dodotis cada vez más perfeccionados para el segundo hijo no fuera privilegio suficiente, y dodotis que rozaban la excelencia para la tercera todo un lujo, a Lali le llega además justo a tiempo la modernidad de los pañales con velcro, transpirables, de máxima absorción, dermatológicamente testados y anatómicamente adaptados a las necesidades de las personas mayores. En el momento preciso que los necesitará para su madre, llega lo que ahora nadie llama gasas ni dodotis y se ve que ahora hay que llamar pañales desechables