Barcelona llenará la Feria Internacional del Libro de Guadalajara de rosas y libros
Barcelona, invitada de honor este año, sigue desgranando un intenso programa de actividades en una de las ferias del libro más influyentes del mundo, que clausurará esta edición el próximo domingo 7 de diciembre con una singular celebración del Día de Sant Jordi en México.
Texto: Redacción Foto: Lucas Amillano
La FIL es, después de la feria de Frankfurt, la segunda feria internacional del libro a nivel mundial en volumen de negocio y se disputa ser la primera del mundo en número de visitantes con la Feria del Libro de Buenos Aires. En esta edición de 2025 la FIL espera volver a superar los 900.000 visitantes del año anterior. A lo largo de estos días se han sucedido las colas de lectores ávidos de comprar libros y asistir a las actividades culturales. Dos mil editoriales y más de 800 autores de 45 países están están convirtiendo la ciudad mexicana en capital mundial de la edición.
Los cientos de miles de visitantes de la FIL este año se han encontrado, desde la apertura el pasado 29 de noviembre, con una novedad: tienen que atravesar una plaza porticada con árboles y bancos, como si en lugar de llegar al recinto Expo Guadalajara que alberga la feria llegasen a una cálida plaza de Barcelona. El pabellón de Barcelona como ciudad invitada de honor de esta edición ha sido concebido como el espacio que todos van a atravesar pero donde también se les hace una invitación a quedarse. Una gran plaza porticada abierta al diálogo para asistir a alguna de las actividades que se proponen permanentemente en su auditorio o leer alguno de los 8.000 volúmenes de su biblioteca con autores relacionados con la ciudad.
El intensisímo programa de Barcelona como ciudad invitada sigue desplegándose en su amplio abanico, que parte de la literatura pero quiere mostrar la diversidad cultural de la ciudad. A la lista de 70 escritores en catalán y castellano, representados en la jornada inaugural por el novelista Eduardo Mendoza, se han sumado pensadores, músicos, profesionales de la edición, periodistas o artistas plásticos. En la configuración de su programa se ha mostrado la voluntad de entrelazar el mundo del libro con la ciencia, el pensamiento, las artes escénicas y visuales, el cine, la gastronomia y una mirada múltiple a la cultura que forma parte del ADN de la ciudad.
En el Foro de los artistas los visitantes han podido escuchar estos días a Love of Lesbian, Queralt Lahoz o Tarta Relena y también tendrán la oportunidad de ver en acción a Rigoberta Bandini. En la FIL Pensamiento propuesta por Barcelona se han armado numerosas charlas (y quedan todavía unas cuantas) donde ha sido posible escuchar a Rita Segato, Martín Caparrós, Enrique Krauze, José Sarukhán o Eileen Truax. Las lecturas poéticas, los talleres para pequeños lectores o exposiciones como «Libros de Barcelona”, comisariada por Enric Jardí, o “Vendrán las mujeres-150 años de luchas en las calles de Barcelona”, comisariada por Ingrid Guardiola y Mita Casacuberta, junto a la participación de figuras como Joan Manuel Serrat o el cocinero Gerard Bellver con su fusión de cocina barcelonesa y mexicana que se puede degustar estos días, han ampliado el foco de lo literario.
La idea del equipo de la presencia de Barcelona en la FIL, comisariado por la periodista cultural Anna Guitart, ha sido mostrar las relaciones de la literatura con el resto de manifestaciones culturales, a la par que mostrar la poderosa tradición literaria de la ciudad pero también su presente y su futuro con la presentación de autores jóvenes menos conocidos pero de importante proyección. Ha habido estos días espacio para homenajear a figuras canónicas de la historia literaria de la ciudad, como Carmen Balcells, Joan Brossa, Pere Calders, Ana María Matute, Mercè Rodoreda, Montserrat Roig, Manuel Vázquez Montalbán o Jacint Verdaguer. Pero se está haciendo mucho hincapié en mostrar el presente y el futuro literario de la ciudad. Los dos autores más jóvenes de la comitiva de escritores que representan la literatura de la ciudad son la poeta Juana Dolores y la dramaturga Fer Rivas, que a sus 31 años presentará su primera novela.
Antes de finalizar esta 39 edición de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara ya se puede señalar algo de lo que esta siembra va a dejar. El impulso que se ha dado en los dos años anteriores a las traducciones de libros en lengua catalana al castellano ha sido importante. Asimismo, viajarán de regreso las exposiciones que se han podido disfrutar en México para el público de nuestro país y se irá viendo en los siguientes años cómo este importante escaparate editorial proyecta a los autores de Barcelona hacia otros mercados del libro, con especial importancia para los autores en lengua catalana.
El próximo domingo, como colofón de esta edición, se invitará a los visitantes a una experiencia que nunca antes habrán tenido en la FIL: se realizará una recreación del Día de Sant Jordi, que desde hace unos años es Día Mundial del Libro y llena las calles de Barcelona de rosas y libros. Será el broche a la presencia de Barcelona, que ha tenido por lema una frase de un cuento de Mercé Rodoreda “Vindran les flors” (Vendrán las flores). La plaza porticada de la FIL será como cualquier plaza de Barcelona un 23 de abril y la gente se podrá regalar libros y rosas.
Pero no será un broche para cerrar sino un punto y seguido para continuar. En 2026 la ciudad de Barcelona, en colaboración con el Pen Club, será la sede de la reunión internacional del ICORN, la red internacional de ciudades refugio, que ofrece residencias protectoras temporales a escritores, artistas y periodistas en riesgo a causa de su trabajo. Y ya está en marcha la preparación en Barcelona en 2028 de la reunión anual del IBBY, la Organización Internacional para el Libro Juvenil.









