Adiós a Vargas Llosa
Mario Vargas Llosa fallece a los 89 años en Lima, el ganador del Premio Nobel de Literatura, máximo representante del boom latinoamericano deja huérfanos a millones de lectores.
Texto: Redacción
El escritor nacido en Arequipa en 1936, Mario Vargas Llosa, autor de literatura con mayúsculas con obras como La ciudad y los perros, La fiesta del chivo o El fin del mundo, ha muerto rodeado de su mujer Patricia y sus hijos Álvaro, Gonzalo y Morgana. Creador de magníficas novelas, su vida personal podría ser también el argumento de una de ellas.
Sus padres se separaron antes de que él naciera y durante muchos años pensó que su padre estaba muerto, hasta que a los nueve años el matrimonio retomó la relación y descubrió la verdad. La convivencia con su progenitor nunca fue buena, no veía con buenos ojos que su hijo se dedicara a la literatura y a los 14 años lo ingresó en un colegio militar. No obstante, consiguió, siendo muy joven, colaborar con varios periódicos y estudió Derecho y Literatura en la Universidad de San Marcos, en Lima. A los 19 años se casó con su tía, diez años mayor que él, Julia, lo que provocó un escándalo en la familia.
En 1958 el matrimonio llega a Barcelona, dispuesto a instalarse en Europa. Ese mismo año Vargas Llosa gana el premio de cuentos Leopoldo Alas con su libro Los jefes. Y dos años después marcha a París, donde la pareja se separa, al iniciar Mario una relación con su prima hermana Patricia, con la que se casará en Perú y será madre de sus tres hijos. Este matrimonio estuvo marcado por las idas y venidas amorosas del escritor peruano, una de las más sonadas fue la relación con la “reina de la prensa rosa” Isabel Preysler, con la que convivió entre 2015 y 2022, pero que terminó con el regreso del escritor con su mujer Patricia.
Si su vida amorosa fue agitada, la política tampoco quedó exenta de polémica. Se enfrentó electoralmente con el ultraderechista Alberto Fujimori en 1990. Vargas Llosa se definía como liberal, aunque apoyó a representantes de la derecha más “dura” como José María Aznar o Isabel Díaz Ayuso en España o Álvaro Uribe en Colombia.
Su vida personal ha sido fuente de inspiración de muchas de sus obras, como La ciudad y los perros (1963), La tía Julia y el escribidor (1977) o sus memorias El pez en el agua (1993). Representante máximo del boom latinoamericano con autores como Gabriel García Márquez, Julio Cortázar, José Donoso o Carlos Fuentes. En 2010 gana el Premio Nobel de Literatura y es miembro de la Academia de las Letras española y francesa.
Entre su vasta obra, además de las citadas, hay títulos como Conversación en La Catedral (1969), Pantaleón y las visitadoras (1973), La guerra del fin del mundo (1981), La fiesta del chivo (2000) o Travesía de la niña mala (2006). En 2023 publicó Le dedico mi silencio, su última novela en todos los sentidos donde dejó por escrito que ya no habría más.
Su despedida de la narrativa fue a la vez emotiva y sobria, con música de guitarra y búsquedas utópicas, igual que su marcha en la vida. Siguiendo sus indicaciones, el autor será incinerado en la más estricta intimidad,