Ramón Prieto y Romero, un gran poeta olvidado
La editorial La Palma recupera su poesía y su poemario «Alas».

Ramon Prieto y Romero con su familia.
Texto: Enrique Villagrasa
Bohemio auténtico, libertario y rupturista, Ramón Prieto y Romero (Madrid, 1889-1933) renunció a una existencia acomodada para dedicarse en cuerpo y alma a la creación poética. Prácticamente olvidado hasta ayer, fue una de las figuras destacadas de la irrupción de las vanguardias literarias en el Madrid de los años 20 del siglo pasado. Evolucionó muy rápido desde el modernismo hasta la búsqueda de la creación poética en su estado puro a través del creacionismo y el ultraísmo, bajo la influencia del poeta Vicente Huidobro, con quien mantuvo una intensa correspondencia que se incluye en este volumen, bajo el título de Alas. Poemas (La Palma): <<Buscarte en todas las cosas/ y en todas ellas hallar tu esencia>>.
Hay que señalar que Prieto y Romero se mantuvo en los márgenes de esos movimientos, creacionismo y ultraísmo, para adentrarse luego en un estilo propio que superaba ambas tendencias y, a la vez, asimilaba algunas de sus aportaciones más importantes. La calidad de su obra literaria, en su mayoría inédita hasta ahora, su vida bohemia, dedicada casi por entero a la poesía, y su trágico final hacen de Prieto y Romero una figura única de la poesía española de entreguerras. Y se ha tenido que ocupar de nuestro poeta Ramón Prieto el reconocido profesor emérito de la Universidad de Virginia Andrew A. Anderson, especialista también en Federico García Lorca, de la vida y obra de Prieto y Romero. Ha sido necesario que pasaran un centenar de años para que este libro haya podido salir a luz. Alas es la obra más importante de Ramón Prieto y Romero: “Cuando detrás de mí se cerraron las rutas/ se hicieron melodía mis horas>>.
Así pues, en la nota sobre esta edición se nos dice que ofrece una transcripción fiel del manuscrito mecanografiado del libro inédito Alas, preparado por el autor para su presentación al Concurso Nacional de Literatura de 1924-1925, con 88 poemas. El volumen también contiene Poesías y prosas poéticas sueltas (1918-1927) y los Poemas inéditos (1918-1925); además de los textos de las cartas conservadas que intercambiaron Ramón Prieto y Vicente Huidobro, capítulo que representa la parte más significativa de la correspondencia conservada en el archivo familiar. Y al final del libro está el detallado listado bibliográfico de toda su obra, la de Prieto y Romero, para facilitar a la persona lectora interesada por el poeta y que le guste navegar por las procelosas hemerotecas digitales. Interesante aparato crítico del profesor Anderson, no dejen de leerlo: <<Cuando te hable el silencio/ recógete en ti mismo/ y oye su voz sagrada>>.
Las 100 páginas de introducción: Esbozo biográfico y literario y Estudio crítico, el volumen cuenta con 350 páginas, no tienen desperdicio y además es muy curioso que varias páginas de la citada introducción, de la 45 a la 49, estén dedicadas a ese Concurso Nacional de Literatura de 1924-1925, anunciado el 10 de julio de 1924 y dotado con 4.000 pesetas. ¡Ahí es nada para la época! Premio al que se presentaron entre otros, Rafael Alberti, que resultó ganador, y Gerardo Diego, también premiado. Y el jurado de aquel concurso fue Ramón Menédez Pidal, Gabriel Maura, Antonio Machado, Carlos Arniches y José Moreno Villa. El profesor Andrew señala que <<Sospechamos que Prieto pueda haber invertido muchas esperanzas en el resultado de este concurso, y el fracaso de su obra –o mejor dicho, el hecho de que fuese subestimada o desatendida-, obra que sin duda representaba para él una especie de summa de su producción poética, debió de haber constituido un segundo golpe muy duro, nueve meses después de la pérdida trágica de su hijo>>.
Y añade, una parte interesante y reflejo de lo que pasaba ya en los concursos de poesía de aquellos años: <<algunos efectos colaterales provocados por las decisiones del jurado no tardaron en manifestarse. En una entrega de una columna recurrente, “El espejo indiscreto”, anónima pero probablemente escrita por Vicente Sánchez-Ocaña, redactor del Heraldo de Madrid, se hicieron diversos comentarios entre críticos y satíricos sobre el fallo>>. No salen bien parados los miembros del jurado.
Pero, interesa la poesía de Prieto y Romero, que sí, que se puede y se debe conocer, salvando las distancias de la poesía de aquellos años 20 y la actual. Para mí es muy querida esta poesía pues en ella existe esa vertiente metapoética que tanto me apasiona, puesto que al igual que en ella, en la que escribo, trato de la misma poesía en sus múltiples y diversos aspectos. En la poesía de Ramón Prieto hay además la búsqueda de esa perseguida trascendencia, el trato del yo poético, de la incertidumbre, del dudoso futuro y la angustia del consabido estado poético, casi siempre negativo, aderezado con cansancio, hastío, tristeza, depresión y hasta resignación. Pero es mirada y lenguaje y muchas lecturas: “Que el verso/ nazca de tus manos/ desnudo,/ sin artificios y sin galas,/ sin otra luz que la que en él proyecte/ tu alma:/ con las palabras justas/ y casi sin palabras>>. Es el poema Técnica, pág. 202. ¡Qué buen consejo para los y las poetas!
Alas. Poemas es un volumen justo y necesario para conocer la historia poética no oficial de España, que está construida con los esfuerzos y sudores, alegrías y dolores de muchos y muchas poetas caídas en el olvido. Hay que agradecer a Ediciones La Palma su apuesta en y por reivindicar a Ramón Prieto y Romero. ¿Qué hubiese pasado si hubiera ganado el Nacional? ¿No siempre hay mal que por bien venga, o sí?: <<Te perseguí por rutas ideales/ y por lamentables caminos>>.
Claridad
Huyen por el espejo
los fantasmas,
y en medio
de una divina estrella
de rutas imposibles,
yo
me yergo
más irreal que nunca
y más lleno que siempre
de mi luz verdadera.