El mundo vikingo y su vigencia actual

Seis libros para conocer al pueblo vikingo sin caer en los estereotipos.

Texto: José Ángel LÓPEZ JIMÉNEZ

 

Pocos pueblos y culturas gozan del conocimiento-no tanto del reconocimiento- popular que el otorgado a los vikingos. Bien es cierto que el cine, las series de las diferentes plataformas y parte de la literatura de baja calidad han contribuido más a la difusión de estereotipos que a una aproximación histórica rigurosa. Sin embargo, la cultura vikinga se expandió-apoyada en un desarrollo muy específico de sus embarcaciones- por una buena parte del hemisferio norte: desde América del norte hasta Asia Central, incluyendo Europa oriental. Un conjunto de publicaciones recientes han recuperado desde el rigor histórico la importancia del considerado como período vikingo, a caballo entre la Alta y Baja Edad Media. La primera de ellas es el libro de Irene García Losquiño, Eso no estaba en mi libro de Historia de los vikingos (ed. Almuzara) Doctora en Estudios Escandinavos por la Universidad de Aberdeen ha desarrollado ya una amplia carrera de investigadora-a pesar de su juventud- en torno al mundo vikingo. Con un espíritu divulgativo la obra realiza la promesa que la autora anticipa en la introducción: un viaje divertido. El período cronológico acotado como Edad Vikinga va desde el año 793 d. C., en el que realizan la primera gran incursión en Inglaterra con impacto suficiente para ser recogida documentalmente, hasta el año 1066, cuando en la batalla de Stanford Bridge/Hastings perdió la vida el último pretendiente vikingo al trono inglés. No obstante, desde mediados del siglo VIII ya establecieron contactos con el noroeste-alrededor del lago Ladoga- y sudeste de la actual Rusia; intensificados por el comercio durante los siglos siguientes, los asentamientos alrededor del Volga adoptaron el nombre de rus (el origen de Rusia estuvo en la Rus de Kíev). A lo largo del libro se abordan los principales ejes temáticos de este pueblo: el carácter mercenario, la importancia de sus embarcaciones, el papel relevante de las mujeres guerreras, la expansión territorial, el núcleo familiar y su relevancia, la mitología y el paganismo, sus redes de interacción, y sus incursiones en la Península Ibérica, con fiestas anuales en localidades como Catoira y Foz en recuerdo de las mismas. En el último capítulo la autora realiza un esfuerzo desmitificador contextualizando a los vikingos entre el mito y la realidad. Como en tantas ocasiones, el cine y la televisión han contribuido a la desinformación, primando, según García Losquiño, el espectáculo sobre el rigor histórico. Excelente obra divulgativa, muy bien ilustrada y con una bibliografía y documentación encomiable.

Vikingos. La historia definitiva de los pueblos del norte, de Neil Price (ed. Ático de los Libros) es una novedad de reciente publicación, complemento imprescindible del trabajo anterior. Etimológicamente, ninguno de los integrantes de este pueblo se hubiese denominado a sí mismo vikingo, ya que víkingr– en nórdico antiguo- aludía a un oficio con un significado similar a pirata. Estamos ante un estudio histórico exhaustivo y monumental, con un despliegue documental y bibliográfico muy notable. Elegido como libro del año de Historia 2020 en la lista de The Times. Apoyado en recientes hallazgos arqueológicos. El trabajo intenta hacer una nueva lectura de los vikingos en sus propios términos, intentando verlos como se veían a sí mismos. La visión arqueológica establece las difíciles conexiones entre los cambios sociales y la cultura material. Pero la cosmología vikinga y el Ragnárok, como una suerte de Apocalipsis nórdica, recogen aspectos de la espiritualidad de este pueblo que no han sido estudiados con profundidad y que derivan, en buena medida, de su recepción a través de las sagas islandesas. Los reyes medievales escandinavos continuaron con las incursiones vikingas en el nuevo contexto de las cruzadas y con una finalidad estrictamente religiosa. Estructurado en tres grandes capítulos, este libro no deja ningún aspecto relevante por abordar en torno al fenómeno vikingo, dotando a este pueblo de su singularidad en unos siglos especialmente convulsos de la historia de la humanidad.

Una colección académica dedicada a la publicación de monografías de historia medieval, Sine qua non, de Laergastula Ediciones, nos ha obsequiado en los últimos dos años con dos volúmenes que abordan la expansión vikinga en dos ámbitos territoriales diferentes. En Los Varegos y la Rus de Kiev, de Iván Quesada Mayo, se investiga la conexión directa entre las incursiones y el establecimiento de los vikingos en esta región de Europa oriental y la creación de la actual Rusia: la llegada de los Varegos, la consolidación de la Rus de Kiev, la expansión territorial, y la definitiva cristianización con el ascenso de Vladimir I. Iván Curto Adrados, con Los vikingos y sus expediciones a la Península Ibérica, no se limita a investigar las expediciones en Galicia, Portugal y Andalucía; en una primera parte de carácter global aborda el fenómeno vikingo desde múltiples aspectos: su complejidad y belleza, las fuentes y bibliografía, el factor geográfico como impulso necesario para sus incursiones, la expansión, el retrato del vikingo, la organización social, la economía, el transporte, la guerra y el heroísmo, la sensibilidad artística, las creencias y la percepción a través de la mirada de sus enemigos.

La editorial Desperta Ferro ha realizado un esfuerzo muy importante, como en tantos otros temas históricos, por divulgar diversos aspectos concernientes al pueblo vikingo. En su revista Arqueología e Historia ha dedicado varios números monográficos al mundo vikingo-en su número 13 y 26 respectivamente- así como a la herencia vikinga- número 3- o a la batalla de Hastings, en el año 1066 (cuando el cometa Halley se aproximó a la Tierra, augurio inminente de catástrofe) en su número 60. También ha tenido presente al público infantil con la publicación de Harald, el último vikingo en su colección de Historietas (cómic, novela gráfica). Sin embargo, es el libro Vikingos en guerra, de Kim Hjardar y Vegard Vike su principal aportación bibliográfica al tema. Doctor en cultura vikinga y conservador del Museo de Historia Cultural de Oslo respectivamente nos ofrecen un despliegue cartográfico de todas las incursiones, expediciones y, en definitiva, de la expansión vikinga apoyándose en las tácticas, armamento, fortificaciones, innovaciones militares, tradiciones o embarcaciones. Con cerca de 400 ilustraciones, mapas y fotografías se ha convertido en un fetiche de coleccionismo para todos aquellos interesados en un pueblo al que, con este conjunto de lecturas, empezaremos a ver con otros ojos más informados. Una última mención para quienes quieran aproximarse al tema desde la literatura de ficción: la serie de Bernard Cornwell, Sajones, Vikingos y Normandos (ed. Edhasa) que, a través de diez volúmenes, nos sumerge en la interacción de estos tres pueblos protagonistas de una parte relevante del período medieval.